Friday, November 10, 2006

Posdata

Dos comentarios y les prometo no volver a mencionarlo.
Sólo dos pensamientos que me cruzan por la cabeza y necesito soltarlos, para poder seguir adelante:

1. En un post, estando en Bogotá, dije que me sentía cada día más enamorada de Colombia y menos enamorada de él... nada más lejano de la realidad. A pesar de todo, lo cierto es que pasó lo que tanto temía y me clavé aún más. Quien me conozca aunque sea un poquito sabrá que mentí al escribir eso. Sé que la realidad no fue como la imaginaba, pero con todo y su frialdad, me gustó.

2. Debo reconocer que yo también estuve muuuuuy lejos de ser como soy. Creo que algo que últimamente me ha molestado un poco en mi interior, es escuchar comentarios de que yo puse todo de mi parte y que en mí no quedó, porque la verdad es que no fuí ni la mitad de lo que soy. No pude comportarme de manera normal con él. Y aunque reconozco que esto es de dos y que él tampoco puso mucho de su parte, me siento incluso enojada conmigo misma por no haber podido desempeñarme como tantas veces lo planeé. Ahora ya se nos pasó la oportunidad, la dejamos ir y probablemente no haya más chance de convivir y mostrarnos tal cual somos. Ahí quedó, tristemente, en un intento a medias, la espera de dos años.
Sí, estoy muy enojada conmigo por haber desperdiciado así una oportunidad, porque independientemente de que él haya hecho o no su parte, yo no hice bien mi papel. Es como si durante meses esperaran una audición para participar en la película o la obra de teatro de sus sueños y, llegado el día, al estar frente al director, los nervios los invaden y no actúan bien. Como se dice por acá: gracias por participar y cero esperanzas de volver a intentarlo.

Escribo esto porque quedé muy confundida y, aunque no había querido escribir nada de lo que he sentido públicamente, y me lo he quedado durante días, tenía que gritarlo porque me está comiendo.
Señores, él podrá ser todo lo frío y pasivo que escribí, pero la verdad es que yo no dí lo mejor de mí. No es cierto. No se la crean. Y no me digan que sí porque yo sé que no fue así... tendrían que haberme visto para entenderlo...
Anyway... no lo veo muy convencido de buscar otra oportunidad, así que creo que ahí quedó. Como siempre, muy a mi pesar. Pero bueno, confío que con el tiempo y la ayuda de Dios mi corazón sanará y más adelante encontrará -espero- al hombre correcto.

1 comment:

Anonymous said...

El "hubiera" no existe y por algo se dieron las cosas así. No estaban en la misma sintonía y eso fue. Muchas veces haces clic con alguien y las cosas se dan espontáneas, sin que las tengas que provocar. ¿Qué quieres decir con que no hiciste tu parte, con que no te abalanzaste sobre él por más que te morías de ganas? Estoy seguro de que esa tampoco "hubieras" sido tú. Dices que eres coqueta pero a la hora de la verdad te quedas paralizada (eso ya lo sabíamos y fue lo que pasó). Si en verdad no le interesabas tanto, bonito papel hubieras hecho si te "hubiera" apartado para detenerte o si te "hubiera" seguido la corriente solo porque "a quien le dan pan que llore". Cualquiera de las dos situaciones te hubieran lastimado mucho (¿pero lo paseado quién te lo quita, verdad?). Aunque tal vez es mejor arrepentirse por lo que hiciste, que siempre lamentarte por lo que dejaste de hacer... (la cochina incertidumbre). El lamentarte no va a arreglar nada y si va a poner tu auto-estima por los suelos. Lo que si debe haber sido más que evidente es que te derretías por él (eso no lo puedes ocultar, si de cualquier cosa te ruborizas). Si "hubiera" él sentido lo mismo por tí, algo se habría disparado como si fueran fuego y gasolina. Vuelvo a concederle el beneficio de la duda y pensar que no quiso jugar contigo... (¿será?). Por favor ve el video que te mandé y tal vez entiendas lo que te quiero decir. Un abrazo y perdona tanto sermón. JB