Saturday, April 28, 2007

Sí hay cuartos

Ese parece ser el letrero en la puerta de casa de mi mamá. Así, como en los hoteles de provincia, cuando quieren informar a la gente de que tienen vacantes. Y es que a mi hermano Rodrigo, ese que aparece en la foto haciéndose el borracho, le ha dado por alojar a cuanto amigo se le aparece con problemas emocionales.
Uno de ellos estuvo más de un mes en viviendo en casa de mi mamá cuando tronó con su novia porque no quería irse a su casa ya que allá pasaba mucho tiempo solo y tristeando.
Actualmente tiene otro cuate instalado ahí hace ya varios meses porque su mamá vive en La Paz y él se vino a buscar oportunidades aquí. Le está yendo bien, ha conseguido buenos papeles como actor, pero no les cuento el tiradero que deja por toda la casa. Al menos cocina rico, jejejejeje. Además, es niñero y trata bien a mi hija :P
Al último de los huéspedes de esta seudo casa-hogar-para-jóvenes-con-disturbios-emocionales me lo topé de frente la semana pasada y la verdad que fue sorpresivo porque no me lo esperaba. Yo me quedé a dormir en casa de mi amá para llegar temprano a mi trabajo el día siguiente y Rodrigo no estaba, había salido con sus amigos. De pronto se abre la puerta de su cuarto y sale otro de sus amigos en pijama y con cara de quien se acaba de despertar (a las 9 de la noche). Entonces me enteré que tenía como tres semanas viviendo ahí porque también tronó con la novia y, como la fulana vive en la misma unidad que su mamá, él no había querido irse a su casa y mejor se instaló con mi brother.
Así pues, es oficial. Mi bro tiene la actitud generosa para ayudar a cualquier cuate en desgracia, y lo mejor de todo es que sus amigos no tienen que pagar las sumas estrafalarias que cobran organizaciones como Oceánica, jajajajajaja.
Mi pobre madre, que siempre nos inculcó la generosidad y la hospitalidad, ahora seguro que se da de topes por tanto visitante inesperado, pero ni hablar. Su única esperanza sería cobrar una cuota de hospedaje y terapia, jajajajajajaja.
Y bueno, el depa no es muy grande, pero aún quedan un sofá, un catre y una cama libre... ¿algún interesado?

Thursday, April 26, 2007

Update

¡Hoooolaaaa! Sigo viva, pero bendito sea Dios he tenido mucho trabajo. Ya les contaré, por lo pronto solo puedo adelantarles que estoy muy contenta aunque cansada. Este cambio me demanda mucho más que antes y debo ajustar muchas cosas.
Por lo pronto, me pregunto: ¿cuándo me tocarán unas vacaciones? Jajajajaja
Ni hablar, al menos seis meses sin salir...
Tengo mucho que contarles, como el asunto de la casa hogar para jóvenes con problemas emocionales que mi hermano menor instauró en casa de mi amá y de la que me vine a enterar apenas, cuando me vi rodeada de amigos suyos que prácticamente llegan y se instalan ahí cada que se les da la gana.
El fin de semana les cuento todo, por lo pronto les mando un beso y seguimos leyéndonos.

Monday, April 09, 2007

Aterrada

Emocionada, nerviosa y muy contenta, pero al mismo tiempo completamente aterrada porque el tiempo se me viene encima y tengo que entregar todo en Netmedia. Ya el lunes inicio mi nueva etapa laboral, que implica un cambio de giro y un reto enorme...
Yo sé que puedo, pero de pronto siento una carga grande, el estrés, la nostalgia y mil emociones más.
Ni hablar, ya llega la hora de moverse.

Thursday, April 05, 2007

Y sucedió entonces...


...que el viento sopló y se llevó finalmente el último recuerdo del corazón. Lo que parecía lejano, imposible, finalmente sucedió. Las memorias quedarán para siempre, pero el sentimiento ha volado ya, como las semillas de un diente de león, que el viento lleva y esparce por el camino.

Sunday, April 01, 2007

De vuelta en el sur

Volví a andar el camino aquél que me llevaba a esa cabaña azul enmedio del campo. Caminé despacio pero con la prisa de saber que te irías al amanecer. Me anduve con tiento para no perder el piso mientras el tiempo apremiaba. Toqué a tu puerta, corazón, y dejé el mío esperando afuera para no comprometerlo.
Platicamos, reímos y me deleité con esa franca sonrisa tuya, casi infantil. Me mordí los labios deseando que fuesen los tuyos. Los dedos jugueteaban en la piel del otro; sentí tu tacto sobre mí, rozando apenas mis hombros, mis brazos. Mis manos ansiosas querían llegar a los botones de tu camisa, pero mi nerviosismo lo impidió.
Mientras permanecimos recostados en la hierba, miraba la luna y pienso que hoy se mira igual desde donde tú estás ahora. Reconociendo mi naturaleza, me resigné a que no podría yo avanzar más cerca de tí esa noche. Me llené la vista de tus formas, tus gestos y tus colores, respiré tu aroma y palpé tu textura. Llené mis oídos de tu voz, de tu risa, de tu acento y tus expresiones. El tiempo me absorbió vertiginosamente y un torbellino me levantó abruptamente del prado. Ya era hora de partir.
Entonces sucedió. Me atrajiste hacia ti y juntamos nuestros labios por un breve momento, mientras mis manos jugueteaban en tu cabello y las tuyas se detenían en mi cadera.
Nuevamente sonó el silbato del tren, a punto de partir de la estación. Te miré por última vez y salí de la cabaña, recogí mi corazón y le platiqué lo sucedido... aunque ya él lo sabía, pues se mantuvo espiando por la cerradura de la puerta todo el tiempo.
En el camino de vuelta recogí unas flores para recordar tu aroma y guardé el sonido de un jilguero, para recordar tu voz. Besé una rosa, para no olvidar tus labios, y conservé la sensación de tu cabello entre mis dedos.
Gracias por el momento, lo llevo en mi memoria :)